Padre Pío de Pietrelcina
El Padre Pío, nacido el 25 de mayo de 1887 en Pietrelcina (Italia), fue un sacerdote de la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos, conocido por su espiritualidad, sus estigmas y su dedicación al servicio religioso. Su vida, llena de acontecimientos extraordinarios, marcó profundamente la historia de la Iglesia católica en el siglo XX. A través de sus sufrimientos, obras de caridad y milagros reconocidos, el Padre Pío ha inspirado a millones de fieles de todo el mundo, convirtiéndose en un icono de devoción y fe.
La vida del Padre Pío de Pietrelcina
La vida y la historia del Padre Pío contada a través de los hechos, eventos y vivencias de su vida – Una biografía del Padre Pío con las fechas más importantes. En el curso de su vida, el Padre Pío pasó por muchos sufrimientos y adversidades, pero hoy todavía, los milagros del Padre Pío, sus curaciones y sus obras extraordinarias son ejemplos maravillosos para todos nosotros.
El joven Padre Pío
Su juventud (1887-1903). Francesco Forgione, más conocido como Padre Pío, nació el 25 de mayo de 1887 en Pietrelcina, un pequeño pueblo al sur de Italia. Sus padres se llamaban Orazio Forgione y María Giuseppa de Nunzio. Fue bautizado el día después de su nacimiento. Vivió su infancia y sus años de juventud en Pietrelcina, en un ambiente campestre, sereno y tranquilo, entre la casa, la escuela y la iglesia. La idea de entregar su vida por completo a Dios estuvo presente desde pequeño. Uno de sus directores espirituales, el capuchino Padre Agostino Daniele, contó que a los 5 años de edad comenzaron los éxtasis y las apariciones para el Padre Pío. Otro de sus directores espirituales el padre Benedetto Nardella, en algunas de sus notas indicaba: “A los 5 años ya siente la necesidad de entregar su vida al Señor. Sobre el altar se le aparece el sagrado corazón de Jesús que le hace señas de acercarse y le coloca su mano en la frente. Desde aquel momento sintió crecer en él, fervor de amarlo y de entregarlo todo a Jesús”. A los 12 años recibió la primera comunión y el año siguiente recibió la confirmación.
Padre Pío: Noviciado y Fraile
Padre Pío, fraile capuchino (1903-1910). Francesco deseaba llegar a ser un fraile capuchino; su deseo se realizaría el 6 de enero de 1903, cuando entró en el convento de Morcone (Benevento), en el noviciado de los frailes menores capuchinos de la Provincia Religiosa de Sant’Angelo – Foggia (Italia). El 22 de enero de 1903, vistió el hábito capuchino y tomó el nombre de Hermano Pío. El 22 de enero de 1904, emitió la profesión de los votos simples y a continuación fue transferido al convento de Sant’Elia en Pianisi (Campobasso), en el cual el 27 enero 1907, emitió la profesión de los votos solemnes. Durante los años 1904 -1909, el Padre Pío viajó por varios continentes para completar sus estudios escolásticos y teológicos. Estuvo obligado constantemente a regresar a su casa por motivos de salud. El 18 de julio de 1909 fue ordenado diácono en la iglesia del convento de Morcone.
Padre Pío: Enfermedad y Sacerdocio
Los años de Padre Pío en Pietrelcina (1910-1918). Siempre por razones de salud, el hermano Pío se vio obligado a permanecer en Pietrelcina, acogido por su familia. A finales de 1916 fue asignado al convento de Sant’Anna en Foggia. El 10 de agosto de 1910, fue nombrado sacerdote, en la capilla del duomo Benevento, con la presencia únicamente de su madre, ya que su padre había emigrado a América. Su permanencia en Pietrelcina se caracterizó por ejercer en el ministerio sacerdotal, en colaboración con el párroco, desde una vida de plegarias intensas hasta una constante correspondencia con sus padres espirituales. Desde septiembre de 1911, empezaron a aparecer, en sus manos, los primeros estigmas no permanentes. El acontecimiento se repitió prácticamente cada semana hasta 1918. En este periodo el Padre Pío estaba siempre enfermo, sujeto a constantes acosos, particularmente diabólicos, y visitado por múltiples visiones celestiales. El 6 de noviembre de 1915 fue llamado a las armas en el distrito de Benevento y transferido inmediatamente a Nápoles. Su breve época militar fue interrumpida debido a las largas licencias médicas y termina el 16 de marzo de 1918 cuando por sus pésimas condiciones físicas, lo dan de baja..
Padre Pío: Estigmas y Dones Místicos
Padre Pío: los años de los fenómenos místicos y dones divinos (1918-1919). El 28 de julio de 1916, acompañado del Padre Paolino, llega por primera vez a San Giovanni de Rotondo. En aquel convento es retenido “provisoriamente” y se convierte en su residencia hasta su muerte (23 de septiembre de 1968). En los primeros dos años, el Padre Pío continuó su correspondencia epistolar con sus directores espirituales, con sus hijas espirituales y con las numerosas almas que se reunían ante él. En el convento recibe el cargo de director y docente de los seminarios. Llegado el momento justo, se forma alrededor del Padre Pío un grupo de fieles deseosos de seguirlo espiritualmente. Nace el primer “grupo de oración”. 1918 fue para el Padre Pío un año rico en fenómenos místicos y dones divinos:
- Desde el 5 al 7 de agosto, recibe la “transverberación del cuerpo” (Epist. 1,1051-1056);
- El 20 de septiembre, aparecen los “estigmas” (Epist. 1,1092-1095);
Padre Pío: Aflicciones y Adversidades
Padre Pío: Los años de las calumnias y acusaciones (1919-1931). Este periodo fue muy movido y doloroso en la vida del Padre Pío. En 1919, surgieron algunos artículos periodísticos sobre la estigmatización del Padre Pío y se inician rumores de locura, cada vez más abundantes, dirigidos hacia el convento de San Giovanni de Rotondo. Los devotos concurren principalmente para escuchar su misa y para hacerse confesar. Se inicia el vórtice de las calumnias y acusaciones en contra del Padre Pío. La Santa Sede se vio obligada a intervenir, imponiendo restricciones al Padre Pío y disponiendo su alejamiento del convento de San Giovanni de Rotondo. Esta decisión provocó una fuerte reacción de los devotos, los cuales se alzaron preocupados sobre la posible transferencia del Padre Pío. La orden se suspende poco después. Paralelamente se realizan numerosas inspecciones médicas y espirituales de parte del tribunal supremo de la Santa Sede. El Padre Pío, en este periodo, continuó su vida de plegarias apostólicas en el ministerio de la confesión, en la perfecta obediencia a sus superiores y la jerarquía eclesiástica.
Padre Pío: Suspensión del Ministerio
Padre Pío: años de la segregación (1931-1933). El 9 de junio la Santa Sede ordenó al Padre Pío la suspensión de todos los ministerios, con excepción de las misas que habría tenido que realizar solo y sin fieles, en la capilla interna del convento. Durante todo el periodo de segregación, que duraron hasta el 15 de julio de 1933, la vida del Padre Pío se desenvolverá así: aproximadamente dos horas para la celebración de la Misa; plegarias y oraciones hasta el mediodía, interrumpidas por aproximadamente una hora de estudio; en la tarde más plegarias desde el atardecer hasta casi la medianoche.
Padre Pío: Peregrinos y Penitentes
Padre Pío: los años de relativa calma (1933-1955). El 16 de julio de 1933, el Padre Pío recibió el permiso para celebrar nuevamente la Misa en la iglesia; sucesivamente le viene otorgada la facultad de confesar solo a los hombres y algunos meses después a las mujeres. Retomó su ministerio “mártir del confesionario”. Las penitencias que ocurren para recibir la absolución sacramental, crecen de manera impresionante. Los superiores del convento están obligados a disponer de un sistema de reserva para poder manejar la gran cantidad de personas y mantener el orden. Los fieles también concurren numerosos para participar en su Misa. La iglesia del convento es incapaz de contener tantas personas, tanto es así que el 5 de junio de 1954, Padre Pío se vio obligado a celebrar la misa al aire libre en la plaza exterior de la iglesia. Durante este periodo, se registran visitas de ilustres personajes intelectuales y políticos provenientes de todas partes del mundo. El Padre Pío fundó los “grupos de oraciones” en respuesta a las apremiantes apelaciones del Papa Pío XII que invitaba a la plegaria. “Démonos que hacer -dice recogiéndose la manga-. Respondamos nosotros primero a esta apelación dejando al Pontífice de Roma”. Hoy se cuentan al menos dos mil difusiones en todo el mundo. Durante los años oscuros de la segunda guerra mundial, el Padre Pío fue un “ángel esperanzador” de numerosas esposas y madres, que iban con él para pedir oraciones dedicadas a sus seres queridos que se encontraban en combate y tener noticias de su suerte. También en este periodo, de relativa calma, no faltaron las penumbras. En particular: las cartas anónimas que desacreditaban su consulta moral; el Papa Giovanni XXIII ordenó posteriores investigaciones sobre el Padre Pío; un decreto de la Santa Sede condenó algunos libros no autorizados sobre la vida y obra del Padre Pío.
Padre Pío: operaciones sociales
Este fue un período en el que el Padre Pío comenzó a esforzarse por beneficiar a la sociedad, esfuerzos que luego tuvieron un crecimiento increíble. El 19 de mayo de 1947, comenzó la construcción de un hospital que el Santo de Pietrelcina ha deseado enormemente, llamado “Casa Sollievo della Sofferenza” (Casa Alivio del Sufrimiento).
- 5 de mayo de 1956: se inauguró el hospital “Casa Alivio del Sufrimiento”. Una estructura hospitalaria tecnológicamente a la vanguardia, para hacer frente a arduas exigencias clínicas. El Padre Pío celebró la Santa Misa al aire libre en la presencia de 15.000 personas.
- 2 de julio de 1956: se iniciaron las labores para la construcción de la nueva Iglesia, para hacerle frente al constante aumento de devotos.
- 1956-1958: inauguración de asilos, escuelas y de un centro de formación profesional.
- 1 de julio de1969: consagración de la nueva Iglesia dedicada a “Santa Maria delle Grazie” (Santa María de las Gracias)
Los últimos años de la vida del Padre Pío
Los últimos años de vida (1959-1967). Una misteriosa enfermedad, iniciada el 25 de abril de 1959 terminaría el 7 de agosto, durante la visita de la Virgen de Fátima en San Giovanni Rotondo. El Padre Pío atribuyó su curación a la intervención de la Virgen. Del 30 de julio al 17 de septiembre, la visita apostólica de Monseñor Carlo Maccari hace explotar nuevamente el “caso Padre Pío”. La prensa, ataca con violencia las jerarquías eclesiásticas, la Orden de los Frailes Capuchinos y al convento de San Giovanni de Rotondo. La condición de su salud fue empeorando conforme pasaron los días. Padre Pío camina con mucha dificultad y poco a poco, necesitó usar la silla de ruedas. A menudo, no lograba celebrar la Misa y el hecho comienza a desatar preocupación entre los fieles. Cada vez más y frecuentemente el Padre Pío prefería permanecer solo y rezar. El 24 de noviembre de 1961, por concesión de la Santa Sede, comienza a celebrar la Misa sentado. El 10 de agosto de 1960, el Padre Pío celebró 50 años de sacerdocio. En 1962 y los años siguientes, recibió la visita de numerosos obispos y otros prelados, directamente desde Roma por el Concilio del Vaticano.
Padre Pío: último periodo de vida
El 22 de septiembre, a las 5:00, el Padre Pío celebró la Santa Misa. Al finalizar, tuvo un fuerte colapso sobre el altar. Se aproximó al confesionario para confesarse, pero por su mal estado debió desistir. A las 10:30 bendijo a la multitud que se reunía en la plaza fuera de la iglesia. A las 18:00 bendijo a los fieles reunidos con una plegaria en la iglesia. En el corazón de la noche, a las 2:30 del 23 de septiembre de 1968, muere, después de haber hecho la confesión sacramental, renovando los votos religiosos y recibiendo el sacramento de la unción de los enfermos. El cuerpo estuvo expuesto durante cuatro días en homenaje a los devotos del pueblo y los fieles. A las 15:30 del 26 de septiembre se celebra el solemne funeral al cual asistieron aproximadamente cien mil fieles. A las 22:30 del mismo día fue sepultado.
Padre Pío: Venerable, Beato y Santo
- El 20 de marzo de 1983 inicial el proceso para la canonización del Siervo de Dios
- El 21 de enero de 1990 el Padre Pío es proclamado Venerable por el Papa Juan Pablo II
- El 2 de mayo de 1999 el Padre Pío es declarado Beato con una celebración memorable en la Plaza de San Pedro, precedida por el Papa Juan Pablo II.
- El 16 de junio de 2002 el Padre Pío es proclamado Santo por Su Santidad Juan Pablo II.
La memoria litúrgica de San Pío de Pietrelcina está insertada en el calendario Romano el 23 de septiembre, día de su “Ascenso al cielo”